Mi fe en el sistema y en los partidos políticos y sus representantes a disminuido a niveles históricos.
Últimamente leo que un partido u otro está dispuesto a dar su votos a otro grupo «por responsabilidad política». Es algo muy interesante a la hora de analizarlo; ¿Eso implica que yo no tengo responsabilidad política cuando voto y que tienen que venir unos señores y señoras a utilizar mi decisión? ¿eso quiere decir que no tengo un conocimiento de la realidad política y social de esta nación y es necesario que una entidad política maneje mi decisión y voluntad y se la entregue a otra?
Resulta que MI voto, ejercido desde la responsabilidad personal, la libertad y el análisis, se puede REGALAR.
Y me da igual que sea a cambio de un pacto, de un sillón, de un compromiso o de tortas fritas. El hecho en sí es que si voto a una entidad ya sea porque su PROGRAMA me atrae, sus representantes me parecen COHERENTES o considero que IDEOLÓGICAMENTE me representan es para que ese VOTO sea tratado con RESPETO pues es MI DERECHO CONSTITUCIONAL PRIMORDIAL el elegir a quienes me van a representar.
Pero si en un juego de alianzas sea por el motivo que sea ese VOTO va a parar a otro grupo me tendré que replantear a quién voto o sencillamente NO VOTAR. Si quiero que mi voto vaya al PSOE o al PP le votó al PSOE o al PP, pero si con MI decisión democrática vais a «jugar» no contéis conmigo para las próximas elecciones.